Wednesday 30 January 2013

A day in our sandals

You may be wondering how our days pass by on this beautiful island and how busy can we be if Cuca is not even open. Being distractions dangerously reachable, it may well look like we are spending our days getting a tan and drinking mojitos.

Well, this post is going to reveal the truth of our island life. While all the Balinese walk around giving away their gorgeous smiles, telling us to relax and being a living proof of balance with their environment, we must confess that we struggle to follow their example and advice. This is what a very typical day in our new world is like:

  • Alarm kicks off at 6.30am. We need to get up to beat the jam! 
  • 7.15: we jump in the car and make our way flowing among rivers of motorbikes going to work, women carrying market products on their heads as they make their way home, ceremonies filled with beautiful white costumed worshippers… 
  • At 8.30 we arrive at our first destination, a company where we are asking for a second quotation for our uniforms. We meet a lovely lady who spends an hour telling us about options and their respective pros and cons.
  • It is 10am when we walk into our printer’s shop. We have brought them our designs and today we need to select the colors from their Pantone. It seems they cannot make round stickers in small quantities as they require an expensive custom-made knife. The containers we have chosen for our retail products are round so after discussing for long and looking at different options, we have no choice but to make thousands of labels… we hope you all support us as we have stickers enough for everyone.
  • We now meet the company that is going to engrave our cutlery. They have prepared a sample but unfortunately the result is not as good as we thought it would be. We need to find a solution… what about painting the engraved logo to cover the uneven wood? “It may work”, they tell us, so we need to go back to their workshop in a week time to see the new samples. 
  • Time to collect our “beloved” round containers… This is a hectic Arabic run shop where everyone is immersed in captivating tasks: they make and bottle perfume, among other products, so their job is to smell and smell again. While we wait for our receipt, the owner comes to us and asks us if he can help us with something else… we look at each other and come up with an amazing idea. You will have to wait to find out more…
  • We speed towards an area called Kerobokan, where all the interior design shops are located. We need to find hanging lamps for Cuca. Our designers have come up with a few proposals but they are completely out of our league (designer lights from Italy…) and we really want to find Indonesian alternatives as part of Cuca’s philosophy of going local. After visiting 5 or 6 shops we find one where the owner tell us he can custom-made all type of lamps. We can’t believe our luck! It usually takes us weeks to find the suppliers we are looking for! We get his contact, shake his hand, returned his smile and tell him we love him.
  • Our empty stomachs strike at 4pm… we don’t have time to stop for lunch so we buy some bread and eat in the car on the way to the construction site. We want to have a look at the progress and at the same time collect some paper samples for our menus. 
  • On our way home we stop at a servicing centre. Our car has been working as hard as us and needs a little oil change. 
  • We get back home at 7. Time to check our emails and get back to suppliers, interior designers, contractors… We also send emails to everyone we met during the day recapping our meetings and “gently” reminding them of the looming deadlines. 
  • I check once again our “to do” list and take the last few decisions of the day while Kevin starts preparing dinner. 
  • We smiled at each other and tell ourselves we need to take it easy. Things will only get more hectic when Cuca opens and we will need to be rested… Sigh. 

...................................................................................................................................................................
Puede que os preguntéis cómo pasamos el tiempo en esta preciosa isla y hasta qué punto podemos estar ocupados si Cuca ni siquiera ha abierto. Con tantas distracciones tan peligrosamente accesibles, puede parecer que nos pasamos el día tomando el sol y bebiendo mojitos. 

Bien, este entrada va a revelar la verdad sobre nuestra vida en la isla. Mientras los balineses regalan preciosas sonrisas diciéndonos que nos relajemos y siendo prueba viviente del equilibrio con el medio que les rodea, nosotros debemos confesar que nos cuesta seguir su ejemplo y consejo. Así es un día típico en nuestro nuevo mundo: 

  • El despertador suena a las 6.30 de la mañana. ¡Tenemos que levantarnos para evitar el atasco!
  • 7.15: saltamos al coche y nos ponemos en camino discurriendo por ríos de motos que van al trabajo, mujeres de vuelta a casa que acarrean en la cabeza productos del mercado, ceremonias repletas de fieles vestidos de blanco…
  • A las 8.30 llegamos a nuestro primer destino, una empresa a la que hemos contactado para obtener un segundo presupuesto para los uniformes de Cuca. Nos atiende una chica encantadora que se pasa una hora explicándonos opciones y sus respectivos pros y contras. 
  • Son las 10 cuando entramos en el taller de nuestra imprenta. Hemos traído nuestros diseños y hoy tenemos que elegir los colores de su gama Pantone. Resulta que no pueden hacer pegatinas redondas en pequeñas cantidades porque necesitan una cuchilla hecha a medida. Los tarros que hemos elegido para los productos que vamos a vender en Cuca son redondos así que tras discutir y considerar varias opciones no nos queda otra que comprar miles de etiquetas… esperamos que nos compréis productos  porque tenemos pegatinas para todos. 
  • Ahora nos reunimos con la empresa que va a grabar nuestros cubiertos. Han preparado una muestra pero desgraciadamente el resultado no nos gusta. Tenemos que encontrar una solución… ¿y si pintamos el grabado para cubrir la madera? “Puede funcionar”, nos dicen, así que volveremos en una semana para ver las nuevas muestras. 
  • Es hora de recoger nuestros “adorados” tarros redondos… Esta es una tienda árabe en la que todo el mundo está inmerso en labores intrigantes: se dedican a hacer y embotellar perfume, entre otros productos, por lo que su trabajo consiste en oler y volver a oler. Mientras esperamos a que nos den el recibo, el dueño se acerca a nosotros y nos pregunta si nos puede ayudar en algo más. Nos miramos el uno al otro y se nos ocurre una idea increíble… Pero tendréis que esperar para saber en qué consiste… 
  • Salimos pintando hacia una zona que se llama Kerobokan donde se encuentran las tiendas de diseño interior. Tenemos que encontrar lámparas para Cuca. Nuestros diseñadores nos han propuesto varios modelos pero están completamente fuera de nuestro alcance (son lámparas de famosos diseñadores italianos…) y además realmente queremos encontrar alternativas indonesias respetando nuestra filosofía de adquirir productos locales. Tras visitar 5 o 6 tiendas encontramos una en la que el dueño nos dice que pueden manufacturar cualquier diseño de lámpara. ¡Qué suerte! ¡Normalmente tardamos semanas en encontrar los proveedores que necesitamos! El dueño nos da su contacto, le damos la mano, le devolvemos la sonrisa y le decimos "We love you". 
  • Nos ruge el estómago a las 4 de la tarde… No tenemos tiempo para pararnos a comer así que compramos un poco de pan y comemos en el coche de camino a la obra. Queremos ver qué tal va y además recoger unas muestras de papel para nuestro menú. 
  • De vuelta a casa paramos en un mecánico. El coche ha trabajado tan duro como nosotros y necesita un poquito de aceite. 
  • Volvemos a casa a las 7. Es hora de mirar nuestros emails y contestar a proveedores, diseñadores, contratistas… También tenemos que enviar emails a la gente que hemos visto hoy para resumir las conclusiones de cada reunión y recordarles “sutilmente” los inminentes plazos con los que contamos. 
  • Le echo un vistazo final a la lista de las cosas que tenemos pendientes y tomo las últimas decisiones del día mientras Kevin empieza a preparar la cena. 
  • Nos miramos y nos decimos que tenemos que tomarnos las cosas con calma. Todo se va complicar más cuando abramos Cuca y tendremos que estar descansados para entonces… Ay…