Tuesday 11 December 2012

Pick up table 12!


While regular cash registers used to be acceptable, it seems that a restaurant cannot longer efficiently operate without a Point-of-Sale (POS) system, a must in today's technologically advanced world. 

We recently decided it was time to start checking our options for POS and understanding their prices so we have met a few suppliers who briefed us on their respective systems. 


Basic systems are commonly offered in restaurant packages and usually are a combination of hardware and software. They typically include: a touchscreen monitor to enter data (for example customers’ orders), a receipt printer, a cash drawer, a reservation system, kitchen printers, wireless tableside order-entry devices, etc. 

Beyond serving as a method for collecting payments, POS systems also help track sales and inventory and streamline the accounting process. For example, if you start the day with 50 bottles of beer, after entering customers’ orders of 40 bottles, the system will alert you that the restaurant is low in beer stock so you know when you need to order more. Furthermore, they are a powerful communication tool between the dining room and the kitchen. After the waiter has entered a guest’s complete order, he can then transmit to the kitchen, through the POS, the timing on when each dish needs to be served.

Premium features are really smart. For example, nowadays POS can split bills, get instant pairing recommendations to help upsell, reward repeat customers, alerts for customers’ long waiting times, etc. 

The good old days of a waiter coming to your table with a pen and a notepad seem to be coming to an end…


...................................................................................................................................................................

Pese a que las cajas registradoras solían ser suficientes, parece que un restaurante ya no puede operar eficientemente sin un sistema de Terminal Punto de Venta (TPV), una necesidad en el mundo tecnológicamente avanzado en el que vivimos hoy en día. 

Hace poco decidimos que era hora de empezar a investigar nuestras opciones en cuanto a los TPV y enterarnos de los precios, así que hemos visitado unos cuantos provedores y nos han explicado los sistemas que ofrecen. 

Los sistemas básicos vienen empaquetados para restaurantes y normalmente combinan hardware y software. Típicamente incluyen: un monitor de pantalla táctil para introducir datos (por ejemplo los pedidos de los clientes), una impresora de tickets, un cajón portamonedas, un sistema de reservas, impresoras para la cocina, aparatos inalámbricos para tomar pedidos en las mesas, etc. 

Aparte de servir como método de cobro de pagos, los sistemas de TPV también ayudan a registrar las ventas, controlar el stock y estructurar la contabilidad. Por ejemplo, si empiezas el día con 50 botellas de cerveza, después de recibir pedidos de 40 botellas, el sistema te alertará de que el stock de cerveza es muy bajo para que sepas cuándo tienes que pedir más.  Por otro lado, estos sistemas son una gran herramienta de comunicación entre la sala y la cocina. Una vez el camarero ha introducido un pedido completo en el TPV, también puede transmitir a la cocina el momento exacto en que cada plato tiene que estar listo. 

Algunas funciones extra son realmente inteligentes. Por ejemplo, hoy en día los TPV pueden dividir cuentas para que cada cliente pague individualmente, ofrecer recomendaciones instantáneas de maridaje para incrementar las ventas, aconsejar un trato preferencial para clientes habituales, alertar de largas esperas, etc. 
Aquellos maravillosos años en los que un camarero se acercaba a nuestra mesa con un lápiz y una libreta parecen estar desapareciendo…